Me despierto en este mundo en el que perdí el único sol capaz de iluminar este puta vida. No me siento decepcionado, he hecho todo aquello que esta en mis manos por demostrarte que te quiero, que suspiro por una sola palabra de tu boca, que por muy largo y cabrones que sean mis días estaré dispuesto a guardar una sonrisa tan solo para ti. Se que soy poquita cosa, un desgraciado que no tiene ni donde caerse muerto, un elemento que es mejor saltarlo que rodearlo, pero sabes una cosa que aun así puedo mover el mundo si tu lo pides. Pasaran los días, y mis lagrimas seguirán cayendo una tras otra, mi tinta seguirá llenando folios que jamas leerás, porque una princesa merece un príncipe, alguien que le de mas que una sonrisa, que ademas de estar a tu lado y apoyarte, te de el mundo. Yo no puedo darte el mundo, pero estaré siempre cuando me necesites, si el día es corto yo alumbrare tus noches para alargarlos, estaré en cada bache de tu camino para ayudarte cuando quieras, y si caes yo te ayudare a levantarte y cuando estés en la cima, recuerda que yo estaré abajo con una sonrisa, porque tu seras feliz y eso es lo único que me importa.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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