Para dedicar a una mujer especial

  Cuando en mi alma hay cien palabras que decir, cuando en mi alma tengo tantas cosas que decir, con mi alma sigo pensando en cada sueño que me ha despertado, con cada te quiero que se ha deslizado entre mi piel llegando a lo mas hondo de mi vida. Eres esa primavera que acaba conmigo, ese pensamiento que hace que la vida tenga sentido, esa locura que haga que en cada pensamiento siga estando un te quiero que solo vive en mi. Se que eres especial, que cuando cierre mis ojos seras lo primero en lo que piense, que cuando en mi alma haya cien pensamientos haya cien te quiero que solo digan te amo. Amor, es solo lo que se dice con cuatro letras que se puede expresar, que cuando se acaba mi alma se golpea en cada te quiero, con el ritmo de mi vida. Palabras vacias de un corazon lleno, sentimientos que se acaban y que terminan con pensamientos de amor. 

Cuantos suspiros seran necesarios para que me mires,cuantos se necesitan para que te des cuenta de que me muero por ti, para que entiendas que cada sonrisa que se expresa en mis labios solo tiene una causa, para que sepas que en toda mi vida la unica vez que sonrio es estando a tu lado. Quizas no sepas que cuando llega mi soledad me pregunto de quien es la culpa, porque en mis lagrimas hay un sabor a mujer, porque me doy cuenta de que solo tengo miedo a decir lo mucho que te quiero. Pienso en las veces que he estado a tu lado,las veces que he mirado a la luna por las que me escondo, por las que cierro mi vida y dejo un suspiro en cada verso que recito.

Quizas no des valor a estas palabras porque solo son la divagacion de un loco, de una persona que solo rompe su silencio impregnando de palabras un papel porque no se atreve a mirar a esos ojos por los que palpita y decirle que se vuelve loco sin su presencia. Quizas no me creas cuando digo que mi vida esta en tus manos que cada suspiro que sale de mi boca componen las cuatro letras de tu nombre y que miran al cielo para ver si puedo reconocer tus ojos. Me doy cuenta de que el tiempo se detiene, de que la vida no tiene sentido, de que en mi alma hay mas te quiero que recuerdos que puedo almacenar. Quizas llegue el dia en que no recuerde mi nombre, que no recuerde donde vivo, pero se que tu recuerdo me perseguira hasta que cierre mis ojos por ultima vez.

Te das cuenta de que la vida pasa, de que los segundos son pensamientos que corren por tu mente, que miras al pasado en busca de respuestas que el presente jamas te ha dado. Piensas en ti, en esa morena que ha estado en tu cabeza siempre, en esa mirada penetrante que hacia que te temblaran las piernas y a la que jamas te atreviste a decir nada. Guardas silencio, crees que algún día desaparecerá de tu mente como ha desaparecido de tu vida, pero te equivocas, jamas sera asi, porque siempre ha sido lo mas importante en tu vida y jamas lo dijiste. Rezas para que ese tren vuelva a pasar, sin darte cuenta que la vida cada vez te aleja mas y mas, pero sigues aferrado a un sueño, al de compartir tu vida, pero al abrir los ojos sigues junto a esa inseparable amiga llamada soledad, preguntandole a una pantalla en blanco porque el reflejo en el que te ves, dandote cuenta de que esas palabras que hoy escribes no has podido decirlas jamas.

No eres mas que el dulce recuerdo de un amargo amor que no se olvida, no eres mas que las lagrimas incansables de un poeta al que las musas ya no quieren adorar, no eres mas que ese latido frio que se mete en mi cabeza y que es capaz de decir un nombre y que suene para siempre. Eres el todo y la nada de esta vida, las palabras que tantas y tantas veces he de callar, los te quiero de un amor prohibido que se queman en la hoguera de un invierno que no llega. La locura que se hace persona, el sueño que jamas podre alcanzar porque esas palabras estan vacias como lo estan mi alma y los te quiero que me queman en mi boca.  

No vale la pena mirar atrás, no vale la pena decir lo que hice mal o lo que hice bien, lo que siento o sentí en cada momento, ya no vale mas que los recuerdos guardados en un cajón. Se que he perdido, que cuando mire al cielo ya no veré los dos destellos que alumbraban mi vida, que ya no veré menguar la luna para sentir tu sonrisa, que aunque cierre los ojos al abrirlos no estarás. Pero ya no puedo hacer nada, he perdido en el amor, he jugado mis mejores manos, he amado como nunca se ha hecho y aun así he caído derrotado por la loca fortuna. Solo queda el olvido, el llegar a ese momento en el que tu imagen solo sea el recuerdo del pasado, en el que este corazón loco acepte que te vas y ya no volverás y que por mucho que te sueñe no estarás conmigo. 

Mirando al frente con el rostro mojado siguiendo ese camino que un día lo ilusiono anda este pobre alma que canta su canción. Fui guerrero en estos prados, luchando por un amor, que hoy me desprecia sin darme una razón. Mas yo la quiero como a mi vida, ella a mi no, me dijo que no me quería y me lleve mi desilusión. Camino que se anda por este zarzal, hoy no tengo fuerzas ni siquiera para silbar. Se despide este guerrero de este bello lugar, que un día lo trajo por una princesa a buscar. Lagrimas caen en sus ojos con cada estrofa e la canción, que habita en su cabeza y en su corazón.  Hombre de pocas palabras este guerrero de amor, que termina su camino solo y sin amor. No llores por mi, porque mi corazón se seco, de amar a una princesa que me dio su fin. Vulevo a mi casa, solo y con dolor, de andar por estos caminos de la locura y la pasión. Paso a paso, se borran mis hue...

Escribo con lagrimas en los ojos y con un puto nudo en mi garganta, con el recuerdo de tu imagen en mi mente y una foto tuya frente a mi. Me he comportado como un verdadero gilipollas, como un niñato quinceañero que no sabe lo que quiere. Pero sabes porque, porque eres tan especial que no creo ni que te merezca, solo soy un tio que se enamoro una tarde de alguien demasiado especial y que en vez de decirle lo que siente se dedica ha hacer el gañan. Así me dedico a decir lo que haría, lo que debi haber o lo que tengo que hacer mientras la mujer mas maravillosa de este mundo ni siquiera se imagina que me gusta. Tengo mucho valor para poner indirectas, pero me cuenta mirarla a los ojos, coger su mano y decirle te quiero. Puedo hacer cientos de absurdeces, puedo escribirle miles de entrada en un blog, ponerle un millón de estados en las redes sociales, pero no tengo los cojones para decirle a los ojos eres lo mejor que me ha pasado, te quiero y quier...