Para dedicar a una mujer especial

Quizas esto de amar naciera del sueño mas eterno, de un día como el de hoy en el que las nubes no dejan ver el sol, de un te quiero que se escapa de mis labios cuando miro los ojos de la persona que tanta significa en mi vida. Quizas no tenga las mejores palabras, los versos de un poeta consagrado, la mirada perdida de aquel que vive en sus recuerdos y que nace de un te quiero a la mujer mas bella. Quizas siga soñando, quizás solo las palabras hagan que mi vida mire al cielo y diga lo que de verdad pienso. Amarte es mi locura, amarte es sentirme como nunca lo he hecho, amarte es pensarte y decir que mi vida esta en tus manos. Se que solo digo palabras, que todo es un sueño, que cada segundo se suma a la cuenta de tiempo perdido porque mi amor por ti solo se refleja en mi mirada. 

En el alma dolorida del poeta que cuenta su historia es donde se encuentra el te quiero que se pierde en mi vida, en lo oscuro de la noche con mas estrellas en donde se ven el destello de la mirada de ese ángel que nace de los sueños y que acompaña los te quiero de mi vida. Se escuchan los versos de un hombre entre susurros, de aquel que vive entre lagrimas, de aquel que vive entre sueños que solo aparecen en la mirada de la morena que lo hace soñar. Cada te quiero es un clamor al amor no correspondido, al amor que se pierde entre las palabras, entre las sonrisas ocultas de unas lagrimas que se derraman en la arena que conoce su figura. Los te quiero se hacen eternos, las miradas furtivas y el deseo de tenerte entre sus brazos es quien acompaña a un sueño que se torna eterno.