Para dedicar a una mujer especial

Apenas cuento las horas para volverte a ver, apenas el suspiro de mi alma cansada pronuncia tu nombre bajo un te quiero que se clava en mi alma. Las palabras guardan silencio, las miradas buscan el rostro que en la noche pasada cubría todos mis sueños. Cierro los ojos y de nuevo los vuelvo a abrir y aquí estas, como en la noche anterior, con una mirada que enamora, con un suspiro que desborda pasiones. Te miro y de nuevo imagino la sonrisa mas perfecta, el día mejor-de mi vida, el sueño que se hace realidad. Me devuelves la sonrisa y mi alma se cae en un sueño eterno del que no quiero despertar. el sol ilumina tu cabello, ese azabache que aparece tan solo en mis noches mas oscuras, dos estrellas iluminan tu cara, son tus ojos, la luna ha menguado para igualar tu sonrisa, pero ni su brillo es capaz de eclipsar mi alma como lo hace tu sonrisa. Las palabras sobran, porque con mi mirada digo cada te quiero que hay en mis adentros, cada latido, cada espera es un te quiero que se graba en