Mis letras son hoy el castigo de aquellos recuerdos que no fui culpable, porque en mi alma sigue habiendo unas cenizas de un fuego que jamás encendí. Puede que siguiera los pasos en este difícil camino, que cayera cuando necesite mirar atrás, pero ahora me pregunto que he de hacer por esta vida que me lleva a ningún lugar. Por mas que cierro los ojos puedo tener una mirada perdida, por mas que miro a la luna he de esconderme en la noche mas oscura, ahora quiero ser fuego para que en esta vida no hay ninguna. Si quiero decirte que ya no tengo miedo aquello que me lleva esta vida, pues en ella siempre he vivido guiado por dos luceros que ahora me han abandonado. No guardo mas silencio, pues mis palabras son las que me llevan a la tumba por no decir un simple te quiero ahora mi soledad siempre me acompaña.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
Comentarios
Publicar un comentario