Son mas fuertes mi silencios que mis palabras, mas fuertes mis locuras que desganas de olvidarte, mas dura mi alma que aquellos pensamientos que evocan a estas lagrimas a llenar este mar donde navega una botella con un mensaje dentro. Quizás sean mis ultimas palabras, pues no hay silencio mas grande que el que me lleve a la tumba sin haber mirado antes tus ojos y despedirme del brillo mas grande. Quizás esto no sea el amor del que tanto hablan, quizás solo entienda que en mi vida solo hay parches que no tapan mas que mis errores, esos que tanto me han llevado, esos que tanta vida me han costado. Siento que cada eternidad hay un lugar en el que mi alma se despega, una ternura en el que miro a un horizonte y me despego por cada sentido, una ternura que sigue estando presente mas halla de un olvido que no me lleve a ninguna parte.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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