Mis palabras no son ahora mi única respuesta, sino que desde donde te hablo es desde lo más hondo de mi corazón. Se que tras una pantalla las letras se leen sin saber que el que se refleja en aquella misma pantalla tiene una gran sonrisa y se caen las lágrimas. Ahora mismo miro y leo tus palabras con el corazón en la mano, pensando que me gustaría ser el reflejo que hay ahora mismo en tus ojos, que me gustaría sentir como se riza mi bella con cada una de tus caricias. Se que un beso no hace más que despertar el león que lleve dentro, pero quiero ser tu dragón, el que desvele tus sueños el que los cree junto a ti mientras miramos las estrellas esperando que la vida nos sonría. Me siento rico por contar a tu lado las nubes, por saber que, aunque la distancia es grande, no nos separa más que metros mientras nos une palabras, me siento afortunado por darme cuenta de que eres especial porque tú me haces especial.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
Comentarios
Publicar un comentario