He escrito tantas cartas de amor que hasta mis manos sangran de las letras que han visto, he dicho tantas veces lo siento que ya no encuentro porque he de pedirlo, he mirado tantas veces a tus ojos pidiendo una oportunidad que hasta en mis sueños lo sigo haciendo. No se que hice mal, cual ha sido mi error, cual ha sido la razón por la que te has marchado dejando a un corazón solitario y dolorido pidiendo clemencia a quien no sabe porque. Te he amado desde el primer segundo y lo sigo haciendo mientras aun me queden fuerzas para respirar. Jamas me he rendido, porque si en este camino alguien te ha cruzado, y me ha demostrado lo importante que eres sera por algo. Creaste un cuento del que no me puedo deshacer, del que no puedo ni quiero olvidar. Hoy te echo de menos, mañana también.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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