Soy el pensamiento opuesto a la condena, soy el que se ciega en el alma cansada de un amor que no se resuelve, soy la locura de un corazón que se hace pedazos y que deja escapar cada uno de sus versos en los momentos en los que la vida no le sonríe. He dejado que sea mi alma la que gobierne mi vida, he dejado que sea mi mente la que se esconda en cada uno de los pensamientos mas eternos de un amor que me domina, he dejado que sean tus ojos los que hagan que se derramen cada una de mis lagrimas pues en cada reflejo encontré cien razones por las que amarte. Mi silencio es el que castiga tu indiferencia, mis palabras son mis sueños hechos pedazos, mi vida son los pedazos de un papel que nunca tiene verso y que se acaba con cada amanecer, como lo hacen la vida escondida en un amor eterno. El silencio no se rompe, la mirada no se fijan, y los sueños sueños se quedan.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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