Te he odiado y te he amado en la misma forma, te he querido mas que a mi propia vida y aun asi sigue sin ser suficiente, he dejado que se escape cada uno de los cien motivos que me han mantenido vivo el sueño de un hombre que aprecia cada uno de los pensamientos que afloran en el. He dejado que seas la que guie mis pasos, la que diga donde ha de ir, la que escriba mis ganancias y mis derrotas, la que gire la ruleta en esta vida en la que dispare con la que dispare siempre me espera una bala. Me he sentido perdido, mirando a un firmamento sin estrellas, me he sentido inutil porque la vida era seguir los pasos que nadie me decían donde acabar. Te he amado siempre, lo he hecho desde el segundo en que se clavaron tus ojos en mi, nunca fue bastante y ahora entregando mi vida tampoco, pues en tus manos ha estado mi alma y la has rechazado.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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