Se acaba mi tiempo, pues el desprecio de tu amor no me deja mas camino que la senda que marcaron tus pasos, caminare a oscuras pensando en aquellos instantes en los que te amaba, caminare despacio mientras en mi fuerza quede silencios que romper, caminare mientras la luna sea quien acompañe a mi alma en cada uno de los recuerdos que me ata a este amor que nunca he vivido. Quizás se acaben mis palabras, puede que lo hagan mis llantos, pero jamás lo harán esos pocos recuerdos que han quedado de esos días en que miraba a tus ojos y veía el brillo que los hacia especial. Ahora no me arrepiento, pues tengo lo que amo, tengo lo que quiero, tengo esa mirada que vive en mi cautivada.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
Comentarios
Publicar un comentario