Ni los versos mas tristes calman hoy la voz de este niño enamorado, ni la luz de cien estrellas pueden conseguir que en mi dia haya algo de brillo despues de haber tenido los dos luceros mas grandes del mundo. Mi pensamiento se queda con la unica esperanza perdida, en mi silencio cientos de pensamiento murmuran hacia algo que solo tu y yo podemos reconocer. Me pregunto que es lo que hice mal, me pregunto si en esta vida el castigo es tan fuerte como para que cientos de recuerdos sigan a quien pide el olvide. Me pregunto si lo hice tan mal como que te borres de mi vida dejando atras solo aquello que no quieres. Dejame decirte, que en cada te quiero hay cien razones para hacerlo que me dejan vivir en el pasado, dejame decir que cada sonrisa que ha esbozado mis labios tienen mil razones por las que hacerlo pero que solo mis lagrimas encuentran una sola para dejarme llorar.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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