Para que guardar las palabras que evidencian mis lagrimas, para que gritar los te quiero si solo los puedo escuchar yo, para que cerrar los ojos e imaginar que te sueño si cuando vuelva a despertar se que te he perdido. Da igual que mire a cien estrellas o no pueda abrir mis ojos porque se que cuando quiera abrirlos no te vere cerca, se que aunque diga mil veces lo siento tu no me escucharas, se que da igual lo que diga o haga porque todo esta perdido. Pero sabes que aunque el sol cierre todas las noches siempre hay una luna que vuelve para esconder al sol, para decirme que no dejes lo sueños porque en ellos el que decide soy yo.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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