En esta vida siempre he tenido dos cosas muy claras, lo que me hace falta para ser feliz y cuando he sido feliz, pero las dos cosas no dependen de mi, sino de unos ojos castaños que desde que aparecieron una tarde de otoño no los he podido olvidar. su pelo azabache y una sonrisa picara llenan de recuerdos la memoria de este pobre mendigo que mirando a una luna de mentira ve la cara redonda de aquella chavala que en sus pensamientos tiene presente. El cielo es testigo de cada palabra que he pensado, he gritado o mi vida ha soñado. Los versos que prenden en este alma herida de amor y locura son los testigos de un amor que llena mi vida, mi mente y una sonrisa que alegra mi alma. Mis te quiero son los que llenan de bellos recuerdos las letras que hoy te escribo y que desde lo mas hondo de mi vida pueden decirte que sin ti, no existe mi vida.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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