Apenas han pasado unos minutos desde que te has ido y ya comienzo a echarte de menos, comienzo a añorar esos preciosos ojos, ese aroma que solo tu tienes y esa dulce voz que suena como melodía en mis oídos. Apenas has cerrado esa puerta y ya mi corazón ha dado su ultimo latido, te espera de nuevo en el sitio donde lo has dejado, ansioso de volver a verte, de volver a deleitarte con cada latido. Y yo te esperare donde siempre, inmóvil hasta que llegues, con la ilusión de un niño pequeño el día de los reyes magos, así estaré. Luciré esa bonita sonrisa que me has dejado, esa con la que debe de llegar al cielo.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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