Fría noche donde esclavo de mi soledad miro las estrellas buscando tus ojos esos que me han guiado desde que me dieron la vida. Callo para que el viento traiga tu voz ese susurro de esperanza que saca mía lágrimas y me devuelve la sonrisa. Siento como los latidos de mi corazón se aceleran como mi alma incansable sigue con su fe de ser lo que nunca ha sido. Amarte es el castigo divino por enamorarme de un ángel por mirar al cielo con desprecio sabiendo que tus ojos alumbran mas que cien estrellas. Cayo mis palabras esas que un día me hicieron libre que un día tocaron tu alma he hicieron que cada momento sea único. Sigo por la vereda de los sueños por este amor que me mantiene vivo y que me hace soñar cada noche. Doy gracias por haberte conocido por ser como eres y darme la energía que me faltaba. Te quiero da igual todo lo demás porque lo único que me importa eres tu. Mi vida sueño incansable con tenerte a mi lado y me enamoro mas con cada recuerdo con cada mirada de esos ojos que han grabado tu nombre a fuego.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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