Ya no tengo miedo a decir lo que siento, ya no, ya todo esta perdido, lo que ayer fueron risas o son lagrimas. Te he perdido, lo se, todo por no saber decir te quiero a tiempo, todo por callar mis palabras cuando debía decirlas. Ya es tarde, para decir lo que siento, ya es tarde para mirar esos ojos que han sido mi condena durante tanto tiempo. Solo quedan los lamentos, el que pudo haber sido y no es, el si hubiera hecho o dicho. Lo siento, son las dos únicas palabras que tienen sentido, es lo único que tiene sentido, pedir perdón. He sido un cobarde, tanto tiempo enamorado y no pude decirte nada, tanto tiempo siendo mi sueño y te he dejado escapar, ahora solo me queda esperar, ser algo que nunca pretendí ser.un cobarde. Ahora me lamento, dejo que mis lagrimas dibujen esa figura que tantas veces he pensado, que empañen esos poemas que noche tras noche eran el eco de unas palabras que solo sonaron en mi cabeza. El tiempo ya ha pasado, la oportunidad llego a su fin y yo sigo en el mismo lugar en el que te conocí, sentado el aquel banco esperando que una nueva ruta te vuelva a traer allí.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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