Para dedicar a una mujer especial

He detenido mi vida frente a tus ojos, esos que me han condenado sin saber mas de mi, esos mismos que me hablan en silencio para dedicar un solo segundo a decir lo que de verdad ocurre en mi alma, esos que me castigan para que me de cuenta de que no hay nada nuevo que decir, que mi silencio es mas fuerte que me calvario, que mi alma soporta el único peso que yo mismo le he proporcionado. He dejado que sea tus palabras las que gobiernen mi vida, esas mismas que hace que cuando mire el reloj se detenga un solo instante, que se enclave en cada uno de los te quiero, que se hagan eco de un amor que mire a las estrellas y no siga conmigo pensando en ti.

  Podía ser un día cualquiera, un momento elegido al azahar, una mirada que se pierde en lo mas hondo de un alma cautiva y que hace que sea el eco de un amor que solo nace en las sombras. Horas que se marcan en el reloj, segundos que se detienen para dejar pasos a horas, mientras yo sigo estando en aquel mismo instante en que supe el nombre que se grabaría en mi alma para la eternidad. Solo esperas el momento, el segundo en el que una sonrisa salga de esos labios para darte cuenta de que tu vida ha cambiado, de que ya no eres un insignificante, sino que eres la plenitud de un amor que no se marcha en este instante. Esperas para decir lo que sientes, una fuerza te aúpa, pero no es bastante para romper el miedo que hay a escuchar un no, pero sigues adelante, es mas grande lo que pierdes que el miedo y de pronto lanzas esa pregunta, esa misma que anoche te repetiste mil veces y todo cambia. Ya nada será igual, pues su sonrisa o tus lagrimas te perseguirán para toda la vida.

  He escrito con el alma lo que con mis manos me da miedo a deletrear, veo en mi pantalla el ultimo recuerdo de cuando he sido feliz, de cuando miraba mas lejos que mi propia vida, desde aquel mismo momento en el que me senti enloquecer. Siento como se pierde el apice de mi locura en cada una de mis noches, siento como se hace saber que ya no volveras, como mi almohada se empapa en las lagrimas de recuerdos que no llevan a ningun lado y deja escapando a un hombre que se fue sin amor. Pienso en cada uno de aquellos momentos en los que sonreia creyendo que tenia lo que siempre quise, nunca fue mio, quizas por eso siempre lo he añorado.

  ¿Cuántos pasos he de caminar para no caer en ese abismo? ¿Cuántas noches he de mirar por esa misma ventana para que se escape una risa de tus labios mientras dejo de secar mis lagrimas al viento? ¿Cuándo dejare de mirar perder las hojas a esos arboles con la esperanza que tras una de esas hojas haya la respuesta a mis preguntas? Nada cambia, sigo estando sentado en aquel mismo banco esperando una respuesta a preguntas que nunca he hecho, sigo esperando a alguien que se ha marchado, un tren que paso hace años pero que se fue diciendo adiós sin que yo me diera cuenta. Ahora solo me quedan recuerdos de aquellos momentos, pensamientos ahogados en el alcohol vacío de una botella que se derrama por las manos que tantas y tantas palabras han dedicado. 

  Ayer fue uno de esos dias en los que recordar, ese en el que cambio demasiado mi vida, ese en el que hay un solo segundo en el que todo se echo a perder por una simple respuesta. Valor fue lo que falto en aquel momento, palabras que ahora no sirven de nada, me escondo en lo mas hondo de un amor sin poder mostrar al mundo una sola lagrima por querer ser fuerte. Ahora soy un muro, el mismo que me encierra en la soledad de un amor que se cae a pedazos, el mismo que se hace eco de cada una de aquella historias que vive en mi y que se esconde en un sinfin de locuras sin mas que mirar para adelante. De que em sirve ser libre sino puedo seguir ese camino, de que coño me sirve mirar a cien estrellas si no puedo ver la luna, de que me sirve cientos de miles de palabras, si tan solo una fue la que falto en ese momento para cambiar mi destino.

No hay mas letras que las que se dicen con el alma cuando el silencio se rompe en la mitad de la noche mientras nuestros labios esconden el secreto de la dulzura de nuestras almas encandiladas por una locura que se llama amor. Ciego me hallo por una mirada, mudo me encuentro por no romper en mis labios el silencio que los ata a una locura que solo es el amor que nos procesamos mientras en mi vida hay mas de una distancia que romper. Quien fuera ave para acercase a tu balcon y cantarte cada noche la nana que duerma tus sentidos y en cada amanecer darte los buenos dias mientras mi corazon palpita tan fuerte como lo hace este amor que se desboca. 

Pensamientos, que nacen e un alma cautiva, de un amor no correspondido, de un no entiendo, de preguntas que no se hacen porque las respuestas se encuentran en la mirada. Sonrisas que enamoran, sueños que se hacen desvelos, madrugadas que se alumbran con la mirada de dos enamorados pensando en un presente que se lleva el futuro. Palabras que sobran en en los silencios, canciones que se tararean mientras se pierden los segundos bajo un cielo estrellado y una luna que se esconde. Noches que se hacen amaneceres de un amor que no es tormento, que se ciega en mi vida mientras pienso en lo mucho que me he enamorado de ti. Quizas solo sea el fuego que calienta tu alma, las palabras que no rompen el silencio, el brillo de un amor que se hace hueco en un corazon que late dejando a un lado que se pierdan las miradas de algo tan hermoso que no se puede explicar.