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Cien años en mi soledad

Sentado en el universo de mis pensamientos, allí donde mis lagrimas recuerdan tu sonrisa, el murmullo de tus palabras y el silencio de las mías. Hojas caen de esos arboles que se desnudan con tu sonrisa, de esa flores que envidian tu belleza. Aquí donde la luna enrojece cada noche, sentado escribiendo palabras que jamas te dije, que fueron esos silencios que hoy me matan, esas dagas que clavadas en mi corazón arden y forjan lo mas duro de mi alma. Sangre que corre por este papel, escribiendo aquellas palabras que componen esta oda, esta historia que grabada a fuego consume los días de este calendario llamado vida. Viendo como el tiempo se hace la suma de los ratos en los que no estas, donde me falta todo aquello que he soñado, que quiero, que amo. Intentado vivir en esa linea que separa lo real de lo imaginario, la sonrisa de las lagrimas, el recuerdo de esta soledad en la que me sumerjo. Vivo e el anochecer mas profundo, en la oscuridad de mis sueños, en los pensamientos d

La eterna soledad

Tristeza amarga que se acumula en mi, que vive en mi, apoderándose por cada hora, por cada día que pasa sin saber nada de ti. Lagrimas se derraman buscando a esa persona que un día me dio un motivo por el que sonreír, algo por lo que luchar en esta vida, algo por lo que ser guerrero. Hoy mis letras se borran de esta cabeza, todo porque estos párrafos que hoy llenan libros no salieron de mi boca, formaron esos incómodos silencios por los que hoy ahogo esta soledad entre suspiros y llantos. Mares de recuerdos y sueños incumplidos, mares de lagrimas que recorren estas mejillas y todo por ese pensamiento que hay en mi mente.  Nada cambiara, yo sigo clavado en aquella primera hoja de aquel otoño, aquella que marco el día en que tus ojos fueron mis estrellas, en la que tus palabras fueron mis libros y en la que tu sonrisa es el menguar de mis lunas. Sueños que cada noche se apoderan de mi, me envuelven en esa magia que solo alguien como tu puede hacerlo, enloquece la poca cordura que

Sueños

Sueños, tan solo sueños en la que tu sonrisa es mi luna menguante, donde tus ojos los luceros que alumbran mi vida y donde el latir del corazón la música de mi alma. Cierro mis ojos y te veo, allí donde la locura se hace patente, donde la realidad de tu belleza y mis sueños se unen, en esas imágenes que rompen mis sueños y despiertan mi deseo. Calla, escucha en cada palabra lo que he gritado en cada mirada, lo que he llorado en cada lagrima. Rozas los limites entre la realidad y la ficción, belleza increíble, pero no es eso lo que me enamora. No solo eres un cuerpo de escándalo, eres esa chica que enmudece mis palabras con una mirada, esa que no me deja dormir por estar pensando en ella, esa que cuando escuchas su nombre mi corazón se acelera, golpea tan fuerte que puedes escucharlo donde estés. Eres eso que siempre espere sin conocerlo, el futuro de un amor inalcanzable, eres la felicidad de este hombre que con lagrimas escribe sus poemas, con miradas grita tu nombre y con sus manos

Poema numero tres.

Mar en calma, silencio en esta tarde llena de versos y odas a esta princesa por la que mi corazón llora. Lagrimas que se derraman en este mar de letras que llegan a mi mente y en ella se clavan. Recuerdos de su belleza y de su gran alma con ese corazón eterno que el mio ama. Flor de este mes de mayo que adornas mis balcones llenando mis casas de dulces amores. Beso de tu boca es lo que mas anhelo en esta tarde triste que ahora comienzo.

Silencios en calma.

Silencios en la calma de la tarde, palabras que arden en el pecho de este corazón enamorado, en esta locura que unos llaman amor, otros cielo y yo llamo vida. Aire que entra en mis pulmones, que lleva el perfume de aquella que en mi mente esta, aquella que con esos ojos marrones enloquece mis días y mis noches, me hace poeta y marca mis sueños. Aquella cuya melena negra azabache cubre mis noches, guiando con sus dos luceros a este corazón herido de amor, que muere por cada besos de sus labios, por sentir el calor de sus brazos, la palabras de su boca y la mirada de sus ojos. Ese ángel que enciende mi cielo, que amanece en mis noches y oscurece mis días, que embrutece las lagrimas de mis ojos y enciende mi poesía, que inventa palabras para decirle una y mil veces te quiero. 

ni en mil palabras

Princesa mil palabras escribiría y ninguna podría decirte ni la mitad de lo que este corazón siente. Fuiste ese pasado que llego al presente y cambio mi futuro, la esperanza de unos sueños que se cumplen con el amanecer de tus ojos, el despertar de esos luceros que alumbran mi ser, mi alegría y mi cordura. Despertar con cada sonrisa de tus labios, con el calor de tu cuerpo, con la presencia de tus ojos clavados en mi alma. Aquí me tienes enamorado como el primer día, cambiando noches de sueños por días de ensueño, letras por versos y piropos a la reina de mi alma, a esa que con una mirada cambia mi universo, a esa que puede dar sentido a aquello que nunca lo tuvo. Palabras y palabras se convierten en hechos cada mañana, en los que despertando a tu lado mi alma se alegra, escucha esa canción de tus labios que como pajarillo de primavera alegra este despertar. Me marca una sonrisa tan grande que has se salen los diente. Aun tiemblan mis piernas con cada palabra que sale de mi boca

Silencio del corazón

Sentado frente a esta pantalla de mi ordenador buscando el porque del cuando y el donde sucedió, preguntas que en mi cabeza suenan y suenan y no encuentran respuesta. Buscando aquella tarde en la que sentí tu perfume por ultima ve, donde sentí mi ultimo latido, mi ultimo sueño, mi ultima esperanza. Donde los días pasan, las horas son eternas y para mi solo se cubre de oscuridad, no hay luz, no hay nada, solo la oscuridad de la noche que cubre todo. Busco el amanecer que despertaban tus ojos, las estrellas de mi cielo, la razón de la sonrisa y la felicidad eterna. Me baño en ese mar de recuerdos que cubren de lagrimas y silencios aquellos que una tarde fue alegría, presente y futuro. Eso que unos llaman amor, otros locura y que yo llamo mi vida. Vivo cada día en la penumbra de la soledad y la tristeza, abrazado a un recuerdo que atormenta mis sentidos, mi locura y mi poco ser. Paso los días como hojas de calendario, sumas de horas y recuento de días sin ti. Lagrimas recorren mis