Hola mi dulce princesa;
Se que en estos dias te he tenido abandonada, que en cada suspiro que ha habido de mi alma ha habido un pensamiento que no he podido comunicarte, que cada latido se ha esfumado como lo hacen los dias para demostrarme que cada vez estoy mas cerca de ti. Se que esto es un sueño, pero no quiero despertar, acuname en tus brazos y cantame aquella cancion que haga que esto no se termine jamas. Duerme conmigo, asi tendras ese sueño que no me abandona, ese que siempre estuvo conmigo, cuando mas he llorado y cuando mas he reido. Ahora solo queda el fuego, el que se duerme entre los zarzales, el que se acaba entre cada latido de un amor que no puedo explicar y no convence a nadie.
Se mi hoguera, en las noches mas frias y en los amaneceres mas oscuros, se esa luz que alumbra mas fuerte que la luna llena, se esa esperanza que me mantiene vivo y me da la locura para poder seguir escribiendo estas palabras con las que vivo. Ahora he de despedirme, seguire esa senda que marca tu aroma y me despedire de la vida como la conozco.
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