Cada palabras que llega tuya es un suplo de aire que llena mis pulmones, cuento los segundos que falta para volver a leerte, para poder saber mas de ti, para conocerte mejor. Se que hace unos días eramos completos desconocidos, hoy no imagino mi vida sin poder leerte. Cada tarde miro por la ventana esperando que esas palabras cobren vida, que no sea yo quien las lea, sino el susurro de tu voz el que me diga lo que escribes. Quiero mirar en tus ojos y verme reflejado, ver la sonrisa de tus labios en mis mejillas sonrojadas, quiero mirar al cielo y ver que las únicas estrellas que brillan son la que tienes como ojos. El tiempo pasa muy despacio cuando no te puedo leer, las noches son eternas porque solo puedo tenerte en mis sueños, porque solo puedo soñar con que estas a kilómetros de mi. Pero hay veces que la vida separa dos corazones y mas tarde los vuelve a unir, esa es mi esperanza, porque no habrá distancia que pueda separar a dos corazones que se piensan.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
Comentarios
Publicar un comentario