Los días se hacen eternos, las noches demasiado largas, los sentimientos se ahogan en las lagrimas que por recuerdos impregnan las mejillas que antes se sonrojaban cuando te miraba a los ojos. Mi alma se hace pedazos, los te quiero se amontonan donde antes lo hacían los recuerdos, los versos se llenan de sentimientos que se vacían en un quiero y no puedo al estar tan lejos. La distancia se hace larga, los kilómetros se hacen eternos, la carretera termina en un horizonte del que no veo el fin. Cada segundo es una espina que se quita de mi alma, cada metro me acerca mas a un te quiero que llevo gravado en mi mirada, cada recuerdo me hace una sonrisa porque ni el tiempo ni el espacio hacen que me olvide de quien he amado tantas veces.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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