Muchos dias me pregunto cual es el sentido de mi vida ahora que te has marchado y la respuesta es siempre la misma, ninguno. Me miro al espejo y tan solo veo las sombras de lo que he sido, me duermo entre los recuerdos de mis mejores momentos, preguntandome cual fue mi error para que te marcharas. Mi silencio quizas fue el mayor de mis errores, quizas los te quiero se claven en un alma herida a la cual solo piensa que un te quiero no siempre dice lo que se siente, que mas vale una mirada que cien palabras encadenadas. Los versos quizas fueron la clave de mi locura, el poder mirar a la luna y ver en ella la figura redonda de tu cara, mirar al cielo y comprobar que ninguna de las estrellas brilla como lo hacen tus ojos. Amarte es la locura que se hace presa, amarte es el sentimiento de quien al mirar a sus recuerdos solo ve a quien un dia lo hizo soñar. Sere esclavo de mis palabras, pero quiero que sepas que mi silencio son los te quiero que jamas he podido decirte y que ahora atormentan mi paz.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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