Ya todo me da igual al irte he pedido mi identidad la razón de mi existencia y por lo que he luchado desde el día en que te conocí. Ya no tengo miedo a morir ya no hay razón por la que luchar por la que salir de este pozo sin fondo en el que he caído. Las lágrimas recorren esas mejillas que antes solían esbozar una sonrisa. Callo este amor con palabras que siempre pensé y no te dije sentimientos que arden en mis adentros y que hacen que tu sonrisa siga en mi vida. El amor fue cambiado por lágrimas por sentimientos que ahogan mis penas en un recuerdo de un tiempo mejor de un tiempo que fue un sueño del que no quise despertar. Ahora tan solo me queda esperar sentarme en los recuerdos que me quedaste en aquello que un día me hizo feliz y sonreír. Me aferro a un sentimiento que cubre mi vida que implica mis sueños y que hace que todo aquello en lo que creí ahora se vuelva contra mi. Perdí todo porque tu eres mi todo mi vida, el oxígeno que respiro y las razón por la que comerse el mundo cada día. Te quiero y eso no lo cambiara ni mil años que pasen.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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