Ni los versos callan el silencio de un alma herida, ni los te quiero se esconden tras los labios que tantas veces han susurrado tu nombre, ni siquiera el sueño mas eterno puede hacer que renueve la vida que he perdido a tus pies. No soy la mejor de las opciones, quizas hasta yo sepa que sere la ultima, pero el mirar al cielo y ver las estrellas me hizo darme cuenta de que la vida se perdia por cada uno de mis costados. Lo siento si he fallado, si no supe conservar aquello que no he ganado, lo siento si he perdido algo mas hermoso que la vida misma. Pero ya da igual, el pasado se marcha, mis lagrimas se secaran y mis recuerdos se enterraran conmigo en aquella tumba sin nombre en la que espere algo que jamas llega.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
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