Tengo mas de un millón de letras en mi cabeza, un sueño que no se hace realidad, un nombre en mis labios que me da miedo a pronunciar y una locura que nace de un deseo que se confiesa cada atardecer cuando pienso en esa morena de ojos castaños. Nunca me atreveré a decir que te extraño, jamas me atreveré a decir lo que siento, porque para hacerlo he de perder el miedo a mirar a esos ojos y saber que nunca los volveré a ver. Perderte es mi miedo, mi sueño que se desvanece, mi locura hecha real que se extiende por el tiempo, que nace de un deseo y que muere en mi alma cobarde. Amarte es mi castigo, el castigo por enamorarme de un angel, el castigo por ver las estrellas en una mirada, por soñar despierto, por vivir una vida plena.
Niña hoy quiero que escuches mis palabras, porque hoy no escribe mi mente, sino mi corazón. Desde hace un tiempo lo eres todo para mi, la razón por la que me gusta ver el amanecer, la razón por la que cada noche me asomo a mi ventana a contemplar como las estrellas dibujan tu rostro. Escuchar como el viento en una suave brisa dice tu nombre. Si, hoy soy un hombre enamorado, un hombre el cual no quiere dejar de ver cada amanecer lo bella que es tu sonrisa, un hombre que daría hasta su propia vida, si fuera preciso, para que la niña a la que quiere se sienta siempre feliz, que cada lágrima no sea motivo de tristeza, sino de una felicidad que inunde tu corazón. No se que es lo que te hace especial, lo único que se que eres la ultima imagen que veo al dormir, la primera al despertar y en cada sueño, solo te encuentro a ti. Niña desde que toque tu mano por primera vez, he dormido cada noche con la ilusión de que algún día estuvieras siempre a mi lado, que al despertar estuvieras siempre c
Comentarios
Publicar un comentario