Ir al contenido principal

Entradas

Te amaria aunque no existieras

Podría  llenar este papel con las cosas que me gustan de ti, con las cosas que me enamoraron de ti. Podría decirte que te quiero, que eres especial para mi, pero no es suficiente. Diria mil piropos, escribiría la carta de amor mas hermosa con tan solo mirar tus ojos en esa foto, pero no mereces eso. Tu eres esa parte de mi vida que me da cuerda, que me hace luchar, seguir el camino por muy largo que sea, saltar las piedras, levantar mi cabeza tras tocar el frió barro cuando he caído. Eres esa estrella que guía mi camino, que guía mi vida, esos ojos que me hacen ver el mundo de otra manera, que me hacen ver los cientos de kilómetros en un centímetro. Te convertiste en ese sueño que siempre he querido, en esa persona que me hace sentir bien, que me saca una sonrisa, que enloquece mi alma y que hace brillar mi mirada. Podría  estar aquí toda la tarde y me faltaría tiempo y papel para decir lo que quiero, para decir que tu lo eres todo, que tu lo mereces todo y que mi vida tiene se

aullando a una luna que se esconde

Camino por las zarzas del olvido, aulló a una luna que se esconde en la tenebrosa noche que nos acecha, rompo los silencios que atan a mi boca a no decir un te quiero que lleva toda la vida en mi alma. Susurro una y mil veces tu nombre, escribo cada recuerdo, cada sueño, cada día que pasa y tu cruzas esa esquina. Me siento en este montón de palabras, que son solo eso, palabras de un loco que no supo decir te amo, que no supo decir a esa princesa quédate a mi lado y que hoy es ese mar de lagrimas que ha vendido cara su alma. No hay vuelta atrás, ya es tarde para este que corre tras un sueño, que sueña con un amor que ya marcho, que aunque cruce la esquina ya su llama apago. Es tarde, me repito cien veces, lagrima a lagrima se empañan mis ojos, se borran estas letras que con tanta locura escribo. Pago mi factura, esa que el destino me puso por no decir te amo, clavo en mi vida, cada momento vivido y pido al cielo volver a vividlo. Pero paso, ese tren ya paso, ella se marcho, cerr

Adios amor, adios mi vida

No hay recuerdos que aplaquen este llanto, no hay recuerdos que devuelvan mis sonrisas, no hay recuerdos que hagan que este corazón roto en mil pedazos vuelva a latir. Te marchas como la luna en un nuevo amanecer, como la sonrisa de mis labios al verte cruzar esa esquina, y me quedo en este lugar, en el que me matan los recuerdos de lo vivido, donde se pierden las esperanzas y sueños. Da igual, fuiste lo mas valioso que hubo en esta vida, un motivo por el que seguir adelante, por el que luchar, pero ya nada importa. Zanjare este camino, como he cerrado mi libro de poemas, como he roto mis sueños y mis alergias. Caminare solo, aunque creo que no es la primera vez, tropezare con mil piedras como lo hice ayer, pero no mirare atrás, porque tu barco ya zarpo. Te digo adiós, donde ante te decía hola, donde nuestras palabras se cruzaron mil veces, donde el aire fue testigo de ese perfume que cautivo mi alma. Silenciare mi alma, esa que no acepta la derrota, esa que quiere correr y correr tr

Este loco Don Quijote

No me llames caballero, mas montura nunca traigo, caminando por estas sendas por las que ando y ando. Tampoco soy poeta de estos tristes versos que se escriben de mis manos con la tinta de mi olvido. Tu eres mi princesa, de ese castillo maldito, que aparece en la lejanía y al que nunca he ido. Guardo cada verso en este escueto escrito, para decirle a mi amada, para susurrarle al oído. Pasito a pasito sigo, por esta largo sendero, por el que tu te has ido, saltando los obstáculos que encuentre en mi camino. Las estrellas se apagaron en esta noche que hace frió, me cobijo en tu recuerdo, anhelando lo vivido. No soy mas que un hombre, que se siente herido, por un amor que quiere y no es correspondido. 

Poeta enloquecido

Rompo mi silencio porque mis palabras son los clavo de mi cruz, rompo este silencio, porque no puedo hacer mas jaula a este amor, rompo este silencio, porque tus ojos son la luz que guían mi camino. Aunque calle mis palabras, aunque escuches mis silencios, lee estas lindas palabras que hoy aman tu cuerpo. Nací fruto de este amor prohibido y hoy muero a tu vera, porque en cada lagrima de mi alma hay un te quiero caído en la arena. No puedo mas callarme, porque mi alma me grita, que le diga a mi princesa, que como ella no hay ninguna. Los silencios caen en mis manos y clavan esta pluma, que escribe este diario, que escribe mi locura. No soy un gran poeta, mas mis palabras apenas digo, lo que siento en mi alma y lo que nunca olvido. Eres mi cura, también mi dulce castigo, que hace que mi vida cobre sentido. Soy tu rebaño, y tu mi pastor, al que siempre sigo, porque no puedo olvidar este amor que me mantiene cautivo.  No creas que miento, porque estas son mis palabras, que sirven d
Una pagina mas, que me recuerda a ti, una pagina mas en mi vida, una que me recuerda que te quiero, que aunque pasen mil años tu seguirás siendo ese ángel al que al mirar me volvería a enamorar. Podrían borrarme todos y cada uno de los recuerdos y al verte de nuevo sabría que eres la mujer de mi vida. Me das la vida con cada sonrisa, me haces soñar despierto con tan solo compartir un rato cerca de ti, incluso me haces ser mejor persona por el echo de estar a tu lado. Te quiero y nada puede cambiar eso, ni el tiempo, ni tampoco la distancia, tu eres mi media naranja y lo seras siempre.  Ya perdí hasta la cuenta de los días que llevamos, perdí hasta el día en que te conocí, tan solo porque llenaste de recuerdos cada rincón de mi mente, creaste sueños imposibles que se han echo realidad, me diste cientos de razones por las que amarte, quererte y estar cada segundo a tu lado.  Doy gracias por cada segundo que compartes conmigo, por cada amanecer a tu lado, por esta vida que sol

dime como

Silencios, que recorren mi cuerpo, que arden en mis adentros cada vez que silbo tu nombre, silencios que se rompen con cada verso que escriben mis manos, que grito al cielo y que componen este poemario del autor sin nombre. Cállate corazón, que cada latido me recuerda su rosto, que cada palabra que se escribe en este papel me lleva a su nombre, que en cada suspiro que doy, una parte de su perfume vuelve a mis recuerdos. Ay, mi amor, como callo este vendido sentimiento, esto que me arde en mis adentros, que me grita tu nombre de noche y de dia, que me dice cobarde por cada cruce en las esquinas, que escribe mil versos y prende las llamas de los sueños. Como rompo este destino, este camino que me lleva a ti, este camino que empedrado y bacheado solo tiene una dirección. Como borro de ese cielo las dos estrellas que me guían, la luna que siempre me sonríe y que me recuerda que en alguna parte tu sonrisa persiste. Dime como, borro de cada rincón de mi cuerpo tu nombre, la llama encendida