No encuentro los motivos por los que sonreir, no encuento mas que unas cuantas palabras que salen de mi alma y que pueda dedicarte, no encuentro un sueño que salga de mi mente y que haga que mis dias valgan la pena. Quizas ha cambiado mucho la vida, quizas mi locura ya no sea tan fuerte como lo fue mientras supe que existia en tus ojos. La vida no me sonrie, la vida solo se queda en esos momentos en los que me siento cautivo y sigo siendo esclavo de un pensamiento que no me lleva a ningun lado. Mis palabras son las cadenas que me han mantenido atado a este sentimiento, ahora las apago con cada uno de aquellos pensamientos que siguen en mi. Pero nada ha cambiado solo un monton de sueños rotos, locuras que no dejan que mi vida se escape y pensamientos bajo mi alma cansada.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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