A veces las lagrimas son mas fuertes que las sonrisas, los recuerdos son mas persistentes que los sueños y los suspiros se hacen eco donde las palabras siempre han guardado silencio. Cada te quiero sale por un simple latido que me transporta a donde nunca he estado, a ese lugar donde las sonrisas son eternas, donde las palabras no tienen cabida porque todo lo dicen las miradas. Donde este sentimiento se ahoga en el alma de una hermosa princesa, donde nacen los sueños, donde puedo verme reflejado en los ojos de la mujer mas bella que he conocido siempre. Cada te quiero, cada simple deseo se hace mas eterno porque en el siempre hay un suspiro que me lleva a tus labios donde caigo rendido.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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