Cual sera el silencio que han de romper mis palabras para que adulen vuestros pequeños oidos, cual debe ser el latido de este pobre corazon para que llegue a ti mi dulce princesa. Cual, digame cual, han de ser mis hazañas para que este barbaro loco consiga lo mas valioso es conquistar su corazon. Cuantas han de ser las primaveras que deben ver estas rosas para que la mas linda de ellas me dedique una sonrisa, cuantas noches ha de estar en mis sueños para que al despertar una mañana este en mi presencia. Digame pues, cuantas veces he de cerrar mis ojos y esperar que el murmullo de un te quiero que se desplaza en este aire llegue a ma mujer mas bella. Cuantas noches he de ver las estrellas en el firmamento para poder ver de nuevo tus ojos brillar. Tantas y tantas preguntas y tan solo por este amor que arde en mis venas y que quema mi alma.
Buenos días mi princesa, buenos días mi vida no son mas que horas las que pasaron desde que tu belleza inundaron de nuevo estos ojos que enloquecen con cada mirada a tu persona. Pensando en que mi vida a tu lado es un sueño, un sueño eterno del que nunca quiero despertar, del que al abrir estos ojos ver ese amanecer que solo tu puedes darme. Pensando en la suerte que he tenido de conocer a la mujer mas maravillosa del mundo, con la que soñar despierto es posible, ver un futuro mejor. Eres ese rayo de esperanza al que unirse, con el que poder compartir un mañana, con la que pasear por esos sueños, que antes solo eran eso sueños. Eres esa mujer que un día se cruzo en mi camino, que encendió esta chisca que unos llaman amor, que otros locura y a la que yo llamo vida. Gracias por hacerme creer que los sueños se pueden cumplir, te amo.
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