Esto va dedicado para una chica que conquisto mi corazón. Para alguien que aunque quisiera no olvidaría jamás, porque ella es la razón de mi existencia, la razón por la que escribo estas líneas, la razón por la que me gusta despertar cada mañana.
Mi vida cambio el 19 de octubre de 2009 las 15:45 porque en ese momento fue cuando mi mirada se cruzo con la tuya. Me enamore como un tonto, sin ni siquiera saber tu nombre, cuando lo escuche por primera vez sabría que jamás lo olvidaría. Así ha sido, casi dos años después y sigo como el primer día, me quedo embobado escuchándote hablar, no puedo dormir cuando se que estas triste, no tengo sueños el día que tu luz no inunda mi alma y mi corazón solo sabe latir cuando te siente.
Sabes que desde aquella tarde no ha habido noche en que no sueñe contigo, tarde en la que no coja un folio me ponga a garabatear y escriba tu nombre incluso sin darme cuenta, soñar cada noche contigo, buscarte con la mirada en cada lugar, en cada aula, en cada rincón para tan solo saludarte.
Sabes que desde que te conocí no ha habido día que no piense en ti. Me gusta despertar y ver tu sonrisa. El día que se que estas triste, se me nubla mi día, y cuando se que estas feliz, se me alegra hasta el alma. Me gusta llenar mi tablón de tuenti de gilipolleces, de canciones en las que nunca creí hasta que apareciste. No se desde cuando eres especial, desde cuando eres la única razón, desde cuando hago el tonto por ti, desde cuando me di cuenta, pero merece la pena. Aunque solo sea porque he visto tu sonrisa, he conocido a alguien que siempre ha merecido la pena, a alguien maravilloso que con decirte hola y mirarme a los ojos me derrite.
Condenado a admirar tu sonrisa he perdido la noción del tiempo, no se si en estos momentos estoy en un dulce amanecer, o simplemente ese brillo lo produce la luna. No se, cual es la razón por la que mi corazón duerme de tu sed, porque la locura invade mis noches y no despeja una bruma que te cubre. Pregunto a mi corazón inconsciente de cual es su razón y solo responde, mira al espejo de sus ojos, veras como la dulce locura ha hecho mella en nosotros, veras que el alma que la habita hoy nos domina, nos hace esclavo de un amor que ni el tiempo puede superar.
No me importa gritar a los vientos que mi vida te pertenece, que mi alma no sabe volar sin ti, que mi corazón solo puede latir si te siente, que mi sol solo sale cuando lo ilumina tu sonrisa. Te quiero, te quiero, te quiero…
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