Para dedicar a una mujer especial

El cielo es demasiado pequeño para poder buscarte, para darme cuenta de que el brillo de esos dos luceros no pueden ser de las estrellas. Las palabras se atragantan en cada suspiro del poeta que no encuentra su musa en la que piensa en cada momento. Sueñas con esos momentos que tal vez no lleguen, pero que hacen que mis lagrimas caigan, que mi alma se haga grande, que mi sueño se haga eterno, que mi vida cobre sentido. Me doy cuenta de que mis palabras se acaban en cada momento de mi vida.

En la soledad de la noche, donde la penumbra de un amor prohibido se asoma al balcon, cuando la tormenta riega las palabras de un loco poeta calla el silencio de la mas bella. Ni los pajaros se atreven a cantar frente a vuestra ventana, ni el sol se asoma porque la luna cela de la mas linda de la sonrisa, de la melodiosa voz que canta cada mañana cuando amanece. Vuesta merced abra usted sus ojos y deslumbreme con su belleza, hablame bajito para que mi alma pueda escuchros y recordar cada una de vuestras palabras. Dejame con el silencio de la duda, con el desamparo de un amor prohibido que nace en la cuna del pecado y que se establece en el corazon de un hombre alocado. Por dios digame que me ama, digame que estas palabras que arden en el fondo de mis adentros no son mas que un sentimiento que se ahoga, que un monton de recuerdos que se asoman al balcon de mi boca y que nada mas que debo decir mil veces, vos amo.  

Querida amiga; Hoy me di cuenta que hace mas de un año que apenas se de ti, que ni una triste palabra ha rozado esta amistad que yo pensaba que alguna vez fue algo. No se si es que te va demasiado bien y has olvidado el pasado, si tienes poco tiempo o si ya no merecemos tus palabras. La verdad es que espero que sea lo primero porque al menos me alegraría porque te va bien. Solo quería saber que tal te va, si aun te acuerdas de aquellos que quedaron tan lejos, o que si ya ni siquiera sabes quien soy. Me ha costado escribirte estas letras, no se porque, hubo un tiempo en el que te sentí muy cercana y fuiste alguien muy especial para mi, o al menos lo sigues siendo.  No quiero ser pesado por eso me despido esperando al menos unas cuantas palabras, te deseo lo mejor del mundo que esa sonrisa no haya desaparecido nunca, que tus sueños se hayan hecho realidad y que todo sea mejor que antes.  Un beso enorme alguien que te recuerda.